Gabriela Keselman organizó su viaje a Israel con ayuda de Keren LeYedidut.
A través de sus redes sociales, describió sus avances mes a mes luego de emigrar al nuevo país. “Enero 2022, armé 15 valijas y salí de Ezeiza sin pasaje de regreso. Febrero 2022 aterrizamos en Tel Aviv. Llegamos a un país nuevo. A un barrio desconocido. A un departamento vacío y a un colchón en el piso”- comenta Gabriela
Ella considera que el 2022 fue uno de sus mejores años, ya que no tuvo miedo alguno de iniciar su camino en Israel a su edad. Al llegar empezó a estudiar hebreo cinco veces a la semana durante cinco horas diarias hasta concluir el primer curso. Ese fue tiempo para hacerse de nuevas amistades. Al sentirse tan segura, se animó y volvió a trabajar después de un período de 20 años. ”Todos tenemos dos vidas: la segunda empieza cuando nos damos cuenta que tenemos solo una” – asegura Gabriela.
“Llamamos al Global Center y abrimos la carpeta hacia el futuro. Fueron meses de juntar papeles. Fueron meses de ilusión, euforia, pánico y tristeza. Fueron meses de preguntarnos si estábamos seguros, si volver a empezar con más de 50 era posible. Nos preguntábamos si éramos una familia de valientes o de dementes. Solo teníamos dos certezas: no éramos una familia de inconformistas…”. Así, fue como Gabriela y su familia dio inicio a su proceso de aliá de la mano de Keren LeYedidut. Ella sabe que siempre van a tener a una organización que los sostiene emocionalmente y está disponible las 24hs del día todos los días.
Construir el futuro que uno sueña en Israel es posible.